viernes, 15 de marzo de 2013

Francisco I, El Papa Argentino

Tenemos Papa nuevo luego de la renuncia de Benedicto XVI. El elegido fué un Cardenal Latinoamericano. Y la frutilla de la torta fué que en el Cardenal Jorge Mario Bergoglio recayó la responsabilidad... y es Argentino!.
Todo éste combo produjo una gran revolución en nuestro país. Por tal motivos dialogamos con quien es la máxima autoridad eclesiástica de la zona norte. Monseños Oscar Ojea dedicó un tiempo a contestar algunas preguntas en exclusiva a éste Portal que acá reproducimos:   
Le quiero preguntar si tiene alguna idea de por qué a Bergoglio (ahora Francisco I) lo han elegido Papa.
Es tan difícil eso. Yo creo que debe haber muchos, no uno solo. Pienso que ha sido por ver a un hombre con muchas condiciones. Un hombre de una gran inteligencia. Al mismo tiempo un hombre con una capacidad de situar a la iglesia en el diálogo con la cultura y con el mundo actual de un modo más preciso. El Papa dialoga con el mundo de muchas maneras. Así como Juan Pablo iba y viajaba a todos lados e intentaba el respeto por la tradición de cada lugar en donde iba, besando la tierra, tratando de hablar la lengua de cada lugar, hay otros modos a través de los cuales el Papa puede expresar esa cercanía. La iglesia está muy preocupado por el tema de la evangelización, por el tema de la misión. Bergoglio ha hecho un trabajo muy interesante en Buenos Aires con respecto a la actividad misionera. Pienso que este ha sido otro elemento importante. La iglesia necesita una visión muy transparente y muy austera de su vida y en su predicación.
El nombre Francisco que ha elegido indica un amor a vivir el Evangelio de un modo muy radical, muy entregado, muy absoluto. De hecho, San Francisco de Asís en su vida reflejó esto.
Todo eso me indica que ha sido elegido por muchos motivos juntos. Yo diría, capacidad de diálogo con la cultura y con le mundo actual, transparencia, sencillez y evidentemente los cardenales ha visto que esto es lo que necesita la iglesia. Pero esto es algo que yo colijo sin haber estado allí ni en la mente de ellos. Yo nunca esperé que él fuera elegido Papa, debo decirlo, fue una verdadera sorpresa.
Recién habló usted de evangelización. América Latina es el lugar donde más católicos hay. Durante todo este tiempo los Papas fueron europeos. En este Continente el Catolisismo sufre cierta crisis Esta puede ser una de las razones?.
Eso es importante, porque el que sea un Papa no europeo hace que la principal preocupación del papado no esté basada en la descristianización de Europa sino en la fe popular de América Latina. Este elemento es muy importante. Una persona que conozca la religiosidad popular de América Latina.
Sobre esto quería decirles que Bergoglio tuvo una intervención muy importante en  el documento de Aparecida, que es el último documento de los obispos latinoamericanos que cada diez años tienen su reunión en la cual sacan un documento orientador de acciones pastorales. En esta última Conferencia de Aparecida tuvo una participación muy grande y, particularmente, en todos los temas que hacen a la religiosidad popular y a la fe popular. Lo que usted dice es algo muy posible, el hecho que tengamos el primer papa latinoamericano marca una preocupación, por lado religiosa, por lo que supone América Latina como continente de la esperanza en cuanto a la fe popular, y por otro lado un Papa muy preocupado por las cuestiones sociales.
Vamos a tener un Papa muy consustanciado en los temas sociales.

De hecho él lo mencionó “han ido a buscar a un Papa al fin del mundo.
Ha asumido una iglesia que sale como a abrirse al mundo y en busca de más fieles, de otro tipo de iglesia aparentemente, frente a esta noción de iglesia más abierta al pueblo?
Pienso que sí. Creo que en esa frase “han ido a buscar un Papa al fin del mundo” hay que destacar que él continúa diciendo “aquí estoy”. Y eso es importante porque eso supone “me han ido a buscar pero yo asumo, acepto esta situación”. Con todo lo que ello implica, todo lo que está detrás de eso.
Con esto quiero decirles que es hombre de decisiones, no es un hombre que vaya a estar simplemente a la expectativa, sino que es un hombre de carácter y de toma de decisiones.

Más allá que esta elección lo pone a Begoglio como uno de los personajes más importante de la historia argentina, cómo piensa que va a repercutir para el país. Cómo cree que el papado de Bergoglio va a influir en la Argentina.
Creo que va a ser muy benéfico.  Pienso va a traer muchos bienes. Eso está reflejado en la alegría de la gente, que ayer llenaron las iglesias, la catedral nuestra estaba llena. Yo hablé con mi hermana y me dijo que la plaza de Bursaco y la iglesia estaba llena. Una necesidad de expresión de alegría que fue importante. Eso significa, por un lado, un conocimiento más profundo de la Argentina. La argentina es capaz de dar hombres a la iglesia y al mundo, hombres capaces, con posibilidades de construir la paz, de establecer un diálogo importante con los líderes mundiales. Pensemos que el Papa tiene contacto, a través de la secretaría de estado, con casi todas las naciones del mundo. Que nosotros, que la Argentina tenga alguien que ha compartido nuestras costumbres, nuestra cultura, nuestro modo de ser y conoce nuestras contradicciones, nuestras grandezas, nuestras pequeñeces, es algo que le va a hacer muchísimo bien al país.
Este saludo primero que han recibido estos comentarios, por ejemplo de los líderes mundiales, desde la presidenta de Brasil hasta Barack Obama, pasando por Raúl Castro o el presidente Correa, son expresiones que hablan de una esperanza muy grande. Eso que estoy hablando de una parte del mundo.

Qué opinión tiene sobre el mensaje que dio la presidenta.
Me pareció correcto. Desde el punto de vista del texto, es un mensaje medido, pero, bueno, es un mensaje. Eso fue acompañado después por la presencia de ella, después del fin de semana, en Roma, en la Misa de inicio del Pontificado y en definitiva eso es lo que cuenta.
Me parece que eso es lo que hay que destacar.
Me parece que es un momento donde el hecho de haber sido elegido Papa no tiene que servir a pequeñas mezquindades de política interna, porque estamos ante un hecho que trasciende la política.